Frederick Foswell fue un mafioso y el jefe de los Enforcers de Wilson Fisk. Él llevaba un traje de negocios y un sombrero que le cubría los ojos. Foswell estaba planeando derrocar a Fisk, quien creía que no era un verdadero mafioso que no quería que su "mano se ensuciara", utilizando a Spider-Man como su arma secreta. El plan fracasó y Fisk se enteró de que Foswell había sido el responsable del asalto de Spider-Man a su oficina.[1]
Foswell fue convocado más adelante por Fisk y se enteró de la derrota de Spider-Man por él y Electro cuando su empleador le mostró la máscara de Spider-Man. Foswell quedó asombrado, pero ridiculizó audazmente a Fisk, mostrando su aversión personal por Kingpin. Fisk le hizo gracia que Foswell finalmente le plantara cara y ordenó a los Forzadores que se volvieran contra su líder. Mientras Ox y Montana sostenían a Foswell, Kingpin le colocó la máscara de Spider-Man a Foswell y aplastó la cabeza del mafioso con sus propias manos.
El cadáver de Foswell, que todavía llevaba la máscara, fue arrojado al East River de la ciudad de Nueva York.[2] No obstante, su muerte fue grabada en video desde la oficina de Kingpin y los discos filmados fueron finalmente recuperados por Spider-Man y enviados a Ben Urich, y luego se usaron para una exclusiva del Daily Bugle.