En un momento de su famosa carrera, el célebre director James Cameron planeó dirigir una ansiada película de Spider-Man, pero finalmente, el proyecto fue cancelado.
Producción[]
Poco después de terminar el rodaje de True Lies, la revista Variety anunció que James Cameron había escrito un guion para la película de Spider-Man que Carolco Pictures estaba financiando. En el guion figuraban los nombres del propio Cameron, John Brancato, Ted Newsom, Barry Cohen y Joseph Goldman. Cameron también vinculó a Arnold Schwarzenegger (su más frecuente colaborador) para que interpretará al Doctor Octopus/Otto Octavius. Stan Lee, el mismísimo creador de Spider-Man, expresó interés en interpretar a J. Jonah Jameson, el editor jefe del Daily Bugle.
Meses después de que fuera contratado, Cameron presentó un guion de 47 páginas para Spider-Man (cual escribió en 1991). En esta versión, Cameron contaba de forma diferente la historia de Spider-Man, quien sería interpretado por Leonardo DiCaprio, quien luego colaboraría con Cameron en la aclamada Titanic, en 1997. El guion también contaba con diferentes versiones de Electro y del Hombre de Arena. Electro iba a ser un multimillonario llamado Carlton Strand y el Hombre de Arena iba a ser un sujeto llamado Boyd quien mutaría tras una explosión nuclear en la playa. La película finalizaría con una batalla en el World Trade Center donde Spider-Man le revelaría su identidad a Mary Jane Watson. El guion contenía cierta profanidad, incluyendo una escena de Spider-Man y de Mary Jane Watson teniendo sexo en lo alto del Puente Brooklyn, imitando los movimientos de apareamiento de los arácnidos.
Interesantemente, este guion contaba con algunas ideas originales, como que Spider-Man lanzará telarañas orgánicas. Tristemente, el proyecto acabó cancelado por Carolco en abril de 1992, debido a problemas financieros y legales.
Cancelación[]
Según las fuentes fue el año 1992 cuando el director James Cameron completó la escritura de la que sería la película de Spider-Man. Las causas, por todos los fans conocidas, de que no se llevase a cabo, fueron la lucha de derechos. Y es que en aquellos tiempos Spider-Man iba de mano en mano y difícilmente una productora podía hacer una película sin entrar en una extenuante guerra. De la cual el resultado final era la cancelación del proyecto. De ahí que Cameron se cansase de esperar y se olvidase de Peter Parker y su alter ego. Más tarde, Sony Pictures fue la dueña absoluta de los derechos de Spider-Man (a la hora de llevarlo a la gran pantalla) y Sam Raimi el director elegido para tal tarea.
Visión[]
La visión que Cameron tenía de su héroe de infancia era sumamente cercana al cómic, aunque con ciertas innovaciones en cuanto a la figura de Peter Parker/Spider-Man. Por ejemplo, a lo largo de ese guion, Peter Parker/Spider-Man habla al público a través de Voz en Off, como si fuese una especie de diario en el que relata cómo empezó todo, es decir, el origen del trepa-muros y los obstáculos que tuvo que enfrentar a lo largo del proceso: rechazo/apoyo de ciertos sectores de la gente de NY, la muerte del tío Ben, la figura de Mary Jane Watson, etc.
Otro aspecto importante de Spider-Man, que se mantuvo intacto en la película de Sam Raimi, era el poder genético de lanzar telarañas, es decir, que sus lanza-telarañas sean orgánicas, y no desde disparadores mecánicos adosados en sus muñecas (estos disparadores finalmente fueron vistos en The Amazing Spider-Man). Hay una cosa interesante a tomar en cuenta: el realismo del cómic en la vida diaria. Es decir, que Cameron tomó la influencia de Tim Burton a través de su película Batman; probablemente, sería el primer director en enfocar a los superhéroes bajo una óptica realista. Por ejemplo, el disfraz de Spider-Man está simplemente hecho de malla, es decir, un simple disfraz que alguien normal usaría para la noche de Halloween. Los villanos se visten con ropa ordinaria. Nada de trajes estrafalarios y de colores chillones.
Hay violencia realista, con sangre incluida (al contrario que sucede con las series animadas de Spider-Man y demás superhéroes). Pero, como se sabe, Cameron no pudo llevar esas ideas al cine; fue Bryan Singer, con la película X-Men, quién se ocupó del realismo en los filmes basados en comics, seguido por Sam Raimi, Christopher Nolan, Zack Snyder, y demás directores.
Multimedia[]
Storyboard[]
Storyboards del dibujante italiano Daniel Tomasi, sobre el guion de James Cameron.
